El 2 de octubre 2011, con Ian de tripulante empezamos con fuerte viento a navegar a lo largo del la desembocadura del arroyo, frente al pequeño Yacht Club, pegados sobre la rivera oeste.
Viramos unas tres veces, tratando de ajustar la contra de botavara (downhaul) y otras de la vela, cuando la orza tocó fondo en un banco de arena. Rápidamente Ian levantó un poco la orza, y fuimos a otra parte de arroyo. El viento aumentaba. Viramos de nuevo, y con viento de través, bastante embalados, pegamos en otro banco.
Ahí... tumbamos de inmediato, como si nos hubiesen dado una zangadilla.
Yo tratando de ver donde caía, evitando no terminar sobre la vela y romperla. Poufff, en el agua, busco dónde estaba Ian. El flaco, agil surfista, quedó sentadito sobre el casco. Primera tumbada de su vida, primera del Mojiiito.
Ian, con mis instrucciones, levanta el barco haciendo contrapeso parado sobre la orza. El Mojiiito lleno de agua, yo poniéndolo desde abajo proa al viento, Ian con el balde vaciando la inundación. Traté de subirme, pero el chaleco, de los comunes, no me dejaba, se me enganchaba en la borda. Bajamos la vela, y nadando lo llevé a la rampa del club.
Enseñanzas y conclusiones:
- Nunca navegar en un plano de agua desconocido y sobre todo, tan angosto como el Solís Chico.
- Cuando hay viento, no hacerse el loco. Empezar con la vela dándole por lo menos un rizo, y si se da, aumentarla más tarde.
- Cambiar el chaleco.
- Revisar el mecanismo de la contra de botavara. Es la parte del barco en la cual los cabos hacen más fuerza, y no está funcionando bien.
- Hacer de una vez por todas el par de remos. Cuando se navega a vela en un GIS, los remos no molestan para nada. Pasan desapercibidos dentro del casco.
- Billetera, celular, etc... prohibido embarcarlas. El celular viejo de Ian, inundado. La billetera, terminamos secando los billetes al sol.
Ya cambiado, preparando la vuelta a casa. Tranquilos... bajamos el mástil antes de tomar la carretera. La tumbada fue del otro lado del arroyo, justo enfrente. |
Por más fotos, en otra ocasión. No tuvimos tiempo de registrar la tumbada. Solo estas dos tomadas por Ian preparándonos para el regreso. |